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Este martes va a arribar a la Argentina una nueva misión del Fondo monetario Internacional (FMI), en un contexto en el que la gestión de Javier Milei no cumplió con la meta de reservas estipulada para esta fecha.
Se trata del primer desembarco de los técnicos del organismo multilateral luego de otorgarle nuevamente un préstamo millonario -en este caso de 20 mil millones de dólares- a Luis Caputo, quien ya recibió un crédito por 54 mil millones de dólares cuando fue funcionario de Mauricio Macri.
Los emisarios del Fondo van a revisar la marcha del programa económico del libertario. Allí, “Toto” pretende mostrar como victorias la inflación al 1,5 por ciento en mayo -aunque los precios en dólares se hayan triplicado-, el ajuste en las cuentas públicas y las medidas para acumular reservas, que no son otras que el engrosamiento de las arcas del Banco Central de la República Argentina (BCRA) por medio de la emisión de deuda.
Lo que preocupa a la entidad que encabeza Kristalina Georgieva es la sostenibilidad y la viabilidad de un dólar pisado, que el Gobierno viene manejando para llegar con aire a las elecciones de octubre, ya que es una de las claves por las que el equipo económico no puede acumular reservas.
En ese marco, vale recordar que el BCRA debía sumar 4.700 millones de dólares para cumplir la meta pactada para el 13 de junio, en tanto que el acuerdo entre el Ejecutivo y el FMI contemplaba compras dentro de las bandas, algo que desde la Rosada no hicieron para que no se dispare, otra vez, la inflación.
En consecuencia, Caputo no le cumplió a sus jefes del fondo con el objetivo de reservas, por lo que ahora el organismo decidió postergar hasta julio la revisión.
