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El Gobierno nacional busca que la Unión Tranviarios Automotor (UTA) desista del paro de transporte en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), que comenzaría este martes 6 de mayo.
Es que desde la gestión libertaria buscan que no se lleve a cabo la medida de fuerza luego de finalizada la conciliación obligatoria que le permitió a Javier Milei que el mencionado gremio no fuera parte del último paro general, lo que se tradujo en una merma en el acatamiento a la huelga.
Para evitar que no haya colectivos en el AMBA, convocaron al sindicato a un encuentro este lunes desde las 14 para ver si pueden acercar las partes.
La cartera de Transporte, además, sufrió cambios durante el fin de semana largo y Franco Mogetta, quien era el titular de la Secretaría hasta el primero de mayo, dio un paso al costado y en su lugar asumió Luis Pierrini, un hombre ligado al ministro de Economía, Luis Caputo. En ese contexto, el jefe de Gabinete Guillermo Francos le pidió un “gesto” a los gremios con motivo de que hay un nuevo funcionario.
Sin embargo, desde la UTA buscan que las cámaras empresarias le den luz verde a su pedido de un salario básico de 1.700.000 pesos.
Por el momento las negociaciones se encuentran estancadas ya que las cámaras de transporte (FATAP, AAETA, CEAP, CETUBA, CTPBA y CEUTUPBA) ofrecieron tres sumas no remunerativas de 40.000, 50.000 y 70.000 pesos a abonarse el 26 de mayo, el 16 de junio y el 15 de julio, respectivamente.
En ese marco, desde el sindicato expresaron: “Llegamos al día de hoy con una crisis alarmante por la pérdida del poder adquisitivo”, y concluyeron: “Ya no hay más tiempo, nuestros compañeros no pueden esperar que las respuestas dependan de acciones tibias o conformistas que terminan en acuerdos salariales a la baja”.
