La histórica rivalidad entre Carlos Salvador Bilardo y César Luis Menotti tiene varios capítulos y forma parte de la esencia del fútbol argentino. Los DT campeones del mundo son, sin lugar a dudas, dos de los protagonistas más destacados de todos los tiempos en lo que respecta al deporte nacional y despiertan amores y críticas por doquier. Ahora, sin embargo, en el sumó más leña al fuego fue el exfutbolista y comentarista Diego Latorre recordó el único y particular cruce de ambas figuras y sus equipos en el terreno de juego.
Todo se remonta a 1996, en aquel momento el Narigón dirigía Boca, y el Flaco era el DT de Independiente. El Rojo visitó La Bombonera, pero la mirada no estaba puesta en los jugadores, sino en el duelo que había entre los dos entrenadores Campeones del Mundo con la Selección, los únicos hasta ese momento.
“Estábamos muy tensos. Bilardo no nos permitía cambiar las camisetas y había un enfrentamiento icónico entre los dos, y nosotros quedamos en el medio”, contó Latorre en diálogo con Corta La Bocha. Aquel día Independiente le ganó al Xeneize por 1 a 0, pero el resultado solo fue una ínfima parte de la atmósfera genera en ese momento alrededor de los dos técnicos.
“Todos sabían que yo no tenía una gran afinidad con el Narigón. Se sabía que yo era más Menottista que Bilardista, pero bueno”, recordó Gambeta, aclarando su situación y postura ante ambas filosofías. “No fui a saludar a Menotti por orden de Bilardo, y me arrepiento de eso”, agregó el exjugador de Boca y actual comentarista televisivo.
En la previa, le preguntaron a los dos entrenadores si se iba a producir un saludo. “No, eso es imposible, jamás. Voy a decir lo que dijo (el escritor Ernesto) Sábato alguna vez. Hay cosas que no se discuten, se castigan. Y cada uno castiga de la manera que cree”, dijo Menotti, fiel a su estilo de parafrasear a escritores o artistas. Bilardo opinó lo mismo y remarcó: “No, no quiero saludar a nadie. Pasaron muchas cosas, muchísimas, que se manejaron muy mal, graves. Acá no es cuestión de reconciliación. Es cuestión de métodos de vida”.
Un duelo épico y dos escuelas que son parte fundamental del pasado, presente y futuro de nuestro fútbol argentino, y que parecen estarán enfrentadas por siempre.