Vecinos de un barrio de La Plata se encuentran preocupados por el deplorable estado del servicio en la zona. Según denuncian, desde hace un mes que el agua que corre por sus cañerías es completamente marrón y apuntan, en esa línea, a Aguas Bonaeresnes S.A. (ABSA) por la falta de respuestas.
La problemática estalló en Tolosa y son varias las familias afectadas por los inconvenientes suscitados en el servicio, básico en la vida diaria de los vecinos. “La gente está cansada de coleccionar los números de reclamos como figuritas. ABSA no se hace cargo de nada. Seguimos con el agua con color y con sabor. La gente gasta fortunas en bidones”, apuntó en ese marco uno de los frentistas que se comunicó con un portal local de noticias.
En la empresa, por su parte, negaron la existencia de reclamos específicos sobre lo sucedido y adelantaron a este medio que, no obstante ello, ya se encuentran trabajando para determinar qué fue lo que sucedió. “Se han registrado microcortes de energía en el rebombeo de la zona que hacen que los equipos se detengan y reinicien su funcionamiento de forma brusca, estas situaciones pueden ocasionar turbiedad”, explicaron al respecto y agregaron: “En estos casos, se solicita dejar correr por un breve lapso de tiempo hasta que el agua adquiera su aspecto habitual”.
De acuerdo con los vecinos, las consecuencias de esta situación son variadas, pero sobre todo destacan que se han multiplicado los daños en distintos artefactos y la inversión por mantenimiento que tiene que hacer cada familia genera grandes pérdidas económicas.
Así se acumulan los sedimentos en filtros de electrodomésticos y las canillas.
Para dar cuenta de lo sucedido, los vecinos han grabado incluso imágenes que muestran cómo corre el agua en sus canillas. En los videos compartidos a un portal local de noticias se puede ver que el agua circula sumamente turbia y cargada de sedimentos.
“Tuve que gastar $25.000 en la limpieza de un tanque, de donde sacaron arenilla. Los sedimentos que vienen te tapan el tema del lavarropa, del calefón. Todo esto implica gastos en técnicos y plomeros. ¿Quién se hace cargo por el mal servicio?”, comentó indignado uno de los frentistas que se comunicó con este medio.
