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En las últimas horas, un mural del artista Cristian Del Vitto, ubicado en 122 y 79, amaneció tapado por una pintada promocionando al actual intendente de Berisso: Fabián Cagliardi.
Su intervención reciente por parte de la militancia cagliardista se contradice con la voluntad manifestada por el intendente al reunirse a fines de mayo con los demás candidatos locales y acordar los términos de “una campaña limpia”. En esa oportunidad los concurrentes aceptaron las propuestas del jefe comunal, con la intención de priorizar la limpieza y la no interferencia de la visión de quienes circulan en vehículos o peatones, principalmente en zonas de rotondas y puentes. Del mismo modo se trató el cuidado del mobiliario municipal, espacios públicos, paradas de ómnibus, semáforos y luminarias.
“No es el primer mural que tapa y todos son de Cristian Del Vitto”, denunció un vecino ante el portal Infoberisso, “evidentemente no le importa la cultura al Intendente. Así no crece una ciudad, ni tampoco se hace más linda”, agregó.
Cristian del Vitto pintó ese mural titulado La identidad en 2006, junto con el artista Luis Farías. Si bien la obra había sido tapada anteriormente con grafittis, se esperaba su restauración. “En ese caso fue un vandalismo anónimo”, explicó del Vitto a 0221.com.ar, “ahora ya es un vandalismo institucional”, lamentó.
El artista berissense informa que el mural estaba en lista de espera para ser restaurada y aclara que “un vandalismo previo no justifica este vandalismo”, ya que la obra formaba parte del patrimonio cultural de la ciudad. Ahora, lamenta “ya es irrecuperable”.
Además, el muralista denuncia que, con esta, ya es la tercera obra de su autoría que el municipio no respeta y daña. Lo cual resulta paradójico porque es la misma Municipalidad la que encarga los murales. Del Vitto trabaja para la Dirección de Cultura de Berisso y en el Área de Taller de Muralismo y desde que está la actual gestión, se le encargó la creación de dos murales para la Escuela de Boxeo de Berisso, que él realizó.
Tras la pandemia, el artista supo que sus dos creaciones habían sido dañadas para realizar obras en el lugar. “A uno lo cortaron con amoladora para poner un reflector y en el otro, pusieron cañerías de luz, atravesando caras y cuerpos, pudiéndolos pasar por otro lado”, lamenta. Para peor, cuando manifestó su queja ante el director de Deportes, la respuesta por parte de esa autoridad fue que, si quería hacer el reclamo, que lo hiciera, total “él ya tenía muchas sobre el lomo”.
El artista inició el reclamo en agosto del año pasado y, hasta el día de hoy, no tuvo respuesta. “Yo no estoy para hacer problemas, yo estoy para pintar murales, aclara el artista y agrega: “Los problemas me los generan ellos. Esa es la bronca que me da”.