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Las vacaciones de invierno suelen ser una de las temporadas más esperadas por grandes y chicos, sobre todo si la idea de “vacacionar” implica viajar o realizar una escapada a algún sitio turístico.
La culminación del ciclo lectivo en la ciudad de La Plata, suele dejar un panorama desolador ante la huida de los jóvenes que vienen a estudiar a las diferentes facultades de la UNLP, hacia sus respectivas ciudades/pueblos del interior de la provincia.
Ese panorama, genera que las principales calles y avenidas de la ciudad queden totalmente desiertas, al mejor estilo “The Walking Dead”: ni un alma deambulando.
Para muchos está situación de no contar con la calidez humana de jóvenes paseando y recorriendo las diagonales es angustiante, incluso hay quienes se entristecen. Pero otros disfrutan con gran fervor de ver la ciudad vacía, filas de micros con menos personas y una peatonal comercial con poca gente.
Tal fue el caso del usuario: @alaurini quien a través de su cuenta de Twitter compartió su alegría:“Que tranquilidad en el centro de #LaPlata en vacaciones” comentó.
Luego precisó:“Parece otro mundo”
El usuario es el fiel reflejo de gran parte de la población platense que ve con cierto malestar la convivencia en la ciudad con los estudiantes. No por su presencia en sí, quizá solo por el gran movimiento que generan y la activación social que producen al comenzar el cuatrimestre (y el grado de adolescencia que manejan).
“@alaurini” como otros tantos vecinos, disfrutarán por al menos dos semanas (es decir, lo que dure el receso invernal) de la tranquilidad de la ciudad, hasta que los miles de estudiantes regresen para romper esa paz y calma; y hacer de las plazas, parques, bicisendas y el centro de La Plata, una ciudad con gran intensidad universitaria. Arrazando como una urbe de zombies que genera ruido y malestar a su paso.
