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La Cámara de Diputados aprobó el proyecto de financiamiento universitario, que tiene como objetivo recomponer el presupuesto congelado desde 2023.
El proyecto, impulsado por Unión por la Patria, Encuentro Federal, Democracia para Siempre, la Coalición Cívica y la izquierda, fue aprobado con 158 votos afirmativos, 75 en contra y 5 abstenciones.
La norma recupera la ley votada en 2024, después de la marcha universitaria del 23 de abril, la cual fue vetada por el presidente Milei. Por lo tanto, en mayo de este año, el Consejo Interuniversitario Nacional acercó una nueva propuesta, y los dictámenes salieron el 8 de julio tras un emplazamiento a las comisiones de Educación y Presupuesto.
El proyecto obliga al Ejecutivo a actualizar los gastos de funcionamiento de las universidades desde enero de 2025, tomando como base la inflación acumulada entre mayo y diciembre de este año. A partir de ahí, las partidas deberán ajustarse cada dos meses.
Pero el punto más sensible está en los salarios. La ley plantea una recomposición para docentes y no docentes desde diciembre de 2023, con un aumento que no puede estar por debajo de la inflación oficial. La suba deberá aplicarse al mes siguiente de publicada la norma, ser remunerativa y bonificable, y todo monto en negro tendrá que pasar al básico antes de fin de año
El proyecto ahora espera ser tratado en la Cámara de Senadores.
