El ministro de Economía y candidato a presidente por Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa, habló en las puertas del Palacio de Hacienda tras la reunión que mantuvo con los sindicalistas sobre el Impuesto a las Ganancias.
“Hemos decidido presentar esta ley y esperamos que aquellos opositores que no nos permiten cobrarles los impuestos a aquellos que tienen la plata en el extranjero, al menos se dignen a aceptar que los trabajadores argentinos no paguen más los impuestos a las Ganancias”, comenzó Massa en su discurso frente a una multitud de militantes gremialistas.
El Ministro continuó diciendo: “Creemos que cuando uno tiene una convicción tiene que predicar con el ejemplo y creemos que a pesar de que la Argentina sufre el peor cepo que puede tener un país, que es con el FMI, creemos que es nuestra responsabilidad hacer y no solamente hablar”.
El candidato explicó de qué manera va a financiar la quita del Impuesto a las Ganancias que, al día de hoy, lo pagan aquellas personas que ganan poco más de $700.000. “Argentina le está cobrando un impuesto a los bienes que se importan. Está generando una mejor recaudación en la economía argentina, más la mejora en el consumo y la recaudación de impuesto que ello genera, eso va a servir para financiar la eliminación del Impuesto a las Ganancias”, clarificó.
Por otro lado, mientras el oficialismo envía la ley a la Legislatura, el Ministro confirmó que el Gobierno confirmará la suba del piso mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), que se implementará a partir del 1° de octubre. “Hemos tomado la decisión, por decreto, de impulsar desde el 1° de octubre un mínimo no imponible de $1.770.000. Para que se entienda bien, en la Argentina solo van a quedar 90.000 gerentes, directores de empresa, jubilados de privilegio, entre otros, pagando el Impuesto a las Ganancias.
Sobre el final, dejó algunas palabras para la militancia de cara a las elecciones generales del 22 de octubre en las que competirá por la presidencia contra Patricia Bullrich y Javier Milei. “Hagamos todo el esfuerzo posible para construir el 22 de octubre el triunfo de los trabajadores, de la Argentina, del peronismo, del futuro, depende de ustedes”, dijo y cerró diciendo: “O volvemos al 2015 o caminamos hacia adelante, yo estoy comprometido, me voy a romper el alma, voy a dejar hasta mi última gota de sangre y sudor para darle a los trabajadores argentinos un país donde valga la pena vivir”.
