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El Gobierno bonaerense mostró mediante una serie de imágenes la reactivación de la obra de la planta potabilizadora de agua de La Plata, Berisso y Ensenada. El proyecto, que había comenzado en 2022 y debió detenerse a principios de este año por una redeterminación en los precios, vuelve a tomar impulso con el objetivo de beneficiar a más de 855.000 habitantes de la Región Capital.
Según informó el Ministerio de Infraestructura, la nueva planta, ubicada en la localidad de Punta Lara, abarcará una superficie total de 29.500 m² y complementará a “Ing. Donato Gerardi”, que viene funcionamiento desde hace más de 70 años. Esta combinación permitirá optimizar la calidad del agua y evitar la extracción de pozo, que actualmente es necesaria para cumplir con el abastecimiento.
El proyecto incluye la construcción de una estación de bombeo y una toma de agua cruda del Río de la Plata, que será conducida hasta la planta a través de un acueducto de 2,2 km de extensión. Además, se construirá un acueducto de 5,4 km de longitud para distribuir el agua tratada, ambos con una capacidad de conducción de 10.000 m³/h.
El acueducto de agua tratada se extenderá desde el predio de la nueva planta potabilizadora hacia la intersección de la Avenida 32 y calle 120 en La Plata, donde se conectará con el acueducto que abastece a la zona norte de la ciudad y la Estación Usina Bosques. Este tramo constituye la primera etapa de la futura obra del acueducto hacia el Parque San Martín. En su segunda fase, la intervención permitirá que en sectores como Gambier y Los Hornos se reemplace el agua de origen subterráneo por agua superficial de mejor calidad.
La nueva planta potabilizadora permitirá mejorar el servicio de producción y distribución de agua potable en un 77% respecto a la capacidad actual. Asimismo, el nuevo acueducto de agua tratada incrementará la capacidad de transporte hacia la ciudad de La Plata en un 85%, facilitando una distribución más eficiente hacia el resto de la zona metropolitana, incluyendo las localidades de Gonnet y City Bell, así como los municipios de Berisso y Ensenada.
Se trata de una obra estructural que brindará una solución al histórico problema de abastecimiento, escasez y presión de agua en la región capital, garantizando la disponibilidad del recurso con una proyección poblacional para los próximos 20 años. Una vez finalizados los trabajos y puesta en funcionamiento, la planta será operada por la empresa ABSA.
