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28 Jul, 2023
La Sala III de la Cámara de Apelaciones de Mercedes decidió el pasado 25 de julio revocarle la prisión domiciliaria a Elián Valenzuela-popularmente conocido por su nombre artístico, L-Gante-, que había sido otorgada por el juez de garantías del caso en donde es investigado por privación ilegítima y amenazas contra dos empleados municipales.
Así, seguirá en una celda en la DDI de Quilmes, donde está detenido hace varias semanas. Ahora, la Justicia deberá solicitar cupo en una cárcel bonaerense para su traslado.
“Consideramos, entonces, que las circunstancias apuntadas por el a quo, no se exhiben como un factor decisivo que permita sostener la desaparición o el debilitamiento del peligro procesal”, expresaron los magistrados Carlos Risuleo y Oscar Reggi en su resolución de ocho páginas a la que pudo acceder Infobae.
En el escrito, los jueces aseguran que “no advertimos que las condiciones personales del imputado, valoradas por el juez de grado, se presenten como circunstancias excepcionales que habiliten a morigerar la cautelar que pesa sobre el mismo”.
Risuleo y Reggi consideraron no sólo los peligros procesales, sino también la gravedad de la imputación: “A Valenzuela se le imputan conductas que objetivamente presentan características sumamente gravosas”, aseveraron.
Además, fueron sumamente duros con el juez de Garantías del expediente: “Entendemos que los argumentos dados por el juez de garantías no resisten el análisis… Tal modo de razonar importa un incentivo para que cualquier imputado que se encuentre privado de su libertad atemorice a las víctimas, por sí o por interpósita persona, para de ese modo obtener una excarcelación o morigeración de la coerción”.
Mientras tanto, y en medio de un prolongado período de inactividad en su exitosa carrera musical, y teniendo en cuenta los gastos ordinarios y honorarios de los profesionales legales que actualmente lo representan y asesoran, Claudia Valenzuela, madre del famoso exponente del movimiento musical cumbia 420, fue contactada por el programa Mañanísima (Ciudad Magazine). Durante la conversación, entre varias consultas, se le preguntó acerca de quién está al frente de las finanzas de Elián Valenzuela. La respuesta fue que Maxi, conocido como Maxi El Brother y manager del artista, es la figura legalmente designada para administrar los ingresos de su hijo de manera provisional.
Además, durante la entrevista, Claudia aclaró los interrogantes planteados por Carmen Barbieri acerca de si L-Gante está considerando tomar medidas legales contra aquellos responsables de su detención. En este aspecto, optó por un enfoque prudente, indicando: “Primero queremos tenerlo a él afuera, después seguiremos los pasos que tengamos que seguir en contra de uno o de otro”. Vale la pena mencionar que el artista se encuentra acusado de privación ilegítima de la libertad, amenazas y posesión ilegal de un arma de fuego.
En ese panorama, incluso, Claudia debutó en el teatro siendo parte del elenco de un espectáculo infantil, junto a Emiliano Rella, la ex Chiquititas Nadia Di Cello y Fede Aquilano. Chiquititos al Rescate se llama la obra y la mamá del músico interpreta al personaje de El Hada Madrina. “Esta obra llega al teatro en estas vacaciones de invierno para hacernos bailar, cantar, reír y emocionarnos”, había mencionado la mujer en sus redes sociales para anunciar el estreno de este espectáculo que tiene lugar en el Auditorio Belgrano.
Por qué está preso L-Gante
El 27 de mayo pasado, varios amigos del músico salieron de bailar de un boliche de General Rodríguez. Al salir, tuvieron un altercado con un grupo de personas, entre los que había un empleado municipal vecino del barrio.
“En ese contexto, después del incidente, la Guardia Urbana de Protección Ciudadana del Municipio demoró a los amigos de L-Gante”, detallaron fuentes del caso. Cuando el intérprete se enteró de lo sucedido con sus amigos, decidió actuar por su cuenta. “El músico tomó al empleado municipal, le apuntó con una pistola, lo obligó a subir a su coche y se lo llevó”, describieron.
Así, condujo unas pocas cuadras dentro del barrio Bicentenario, hasta que halló y amenazó a la segunda víctima para que ingrese a su auto”. Así, aseguró un investigador, “los retuvo por 20 minutos, diciéndoles: ‘Si no sueltan a mis amigos, no los suelto a ustedes’”.
Cuando L-Gante se enteró de que sus amigos “habían sido sólo identificados, sin tomarse decisión de restricción de su libertad”, dejó descender de su vehículo a las personas que retenía.