Hábitos de consumo y producción platense: las claves de la variación de la canasta alimentaria en la ciudad

La vocera de FundPlata, Giuliana Verdile, dio detalles sobre el trabajo que vienen realizando desde la entidad en relación a la evolución del costo de la Canasta Alimentaria en la ciudad, que mostró una variación de 1,2 por ciento en noviembre.

Al respecto, explicó que, desde el principio de estos informes se hace relevamiento en 18 comercios con los mismos 26 productos de las mismas marcas en los rubros carnicería, verdulería y almacén: “Siempre relevamos de primeras marcas para poder saber ver una evolución lo más transparente posible” y de manera homogénea.

En ese sentido, Verdile también resaltó que “al haber una diferencia en los hábitos de consumo de la gente”, con la elección de segundas marcas o productos propios de un supermercado, la variación de las primeras marcas puede fluctuar y reflejar una inflación menor a la que se informa desde el INDEC.

Repasando los números obtenidos durante el año hubo saltos importantes en marzo y agosto, momentos en que la canasta alimentaria tuvo variaciones de 3,3 y 3,2 por ciento, respectivamente.

Sobre el incremento de 1,2 por ciento en noviembre, la vocera de FundPlata aclaró que el promedio entre los tres segmentos analizados da cuenta de altas subas en el rubro carnicería, que tuvo un pico de 6,9 por ciento en el undécimo mes del año, mientras que, por la presencia del cordón frutihortícola en la región, el rubro verdulería registró una caída del 5,2 por ciento.

“Eso hace que en el número reflejado de la inflación general de nuestra canasta, parezca que es menor a la que dio el INDEC” que este mes arrojó un 2,5 por ciento y añadió: “Hay que tener en cuenta también que nosotros relevamos menos cantidad de productos, una menor cantidad de distribución y eso hace que los finales valgan”. 

Finalmente, contextualizó que en La Plata, el 30 por ciento de los empleos son estatales y su variación en ningún momento mostró incrementos por encima del uno por ciento, por lo que el aumento salarial no acompaña a la inflación “y eso hace que a la hora de llegar a hacer las compras básicas, sienta el peso de toda la suba del resto de los ejes y no el acompañamiento de los sueldos”.