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En un nueva edición de la Columna de Cine, Nazareno Napal repasó algunas de las películas más representativas filmadas en La Plata, ciudad que no solo ha sido escenario, sino que también ha llegado a convertirse en un personaje más de la narrativa cinematográfica. Aprovechando la cercanía del 142° aniversario de la ciudad, Napal reflexionó sobre la importancia de estas producciones y destacó algunos de los estrenos más esperados. Aquí, un repaso detallado de la conversación:
La Plata como escenario de cine
“La primera vez que hicimos el día de la columna nos acordamos rápido de 7 años en el Tíbet“, comenzó Nazareno, al referirse a una película de 1997 que, si bien se rodó en Mendoza por sus paisajes montañosos, también utilizó un icónico edificio de La Plata: la Estación de Trenes. “Cuando tenían que filmar algunas escenas más históricas y de infraestructura y cuando todo parecía que se volvían a Europa, encontraron en la ciudad de La Plata un lugar ideal como es la Estación de Trenes”, explicó. La estación, que conserva su histórica fachada, fue utilizada para recrear la Austria de 1939. En ese sentido, Napal recordó que “la estación fue ambientada en una especie de microclima,” lo que causó un gran revuelo en la ciudad.
El rodaje, que duró tres días, involucró a más de 3.000 personas para cubrir 300 puestos de extras. “Algunos hacían de judíos, de aristócratas, de obreros y de soldados,” detalló Napal, quien recomendó la película como un clásico que todo amante del cine debe ver: “7 años en el Tíbet es para tachar de la listita”.
Otro filme destacado que se rodó en La Plata es El hombre de al lado, dirigida por Mariano Cohn y Gastón Duprat en 2009. Protagonizada por Rafael Spregelburd y Daniel Araoz, la película se filmó en la emblemática Casa Curutchet, una obra maestra de la arquitectura de Le Corbusier. En este caso, la casa no solo sirve como escenario, sino que se convierte en un personaje esencial. “El edificio tiene impronta dentro de la misma narrativa”, destacó Napal, señalando que El hombre de al lado es una historia que aborda las tensiones entre dos vecinos de clases sociales opuestas. “Es una película recomendada porque tiene tintes dramáticos con los que se puede empatizar,” añadió.
La Noche de los Lápices y el cine como memoria histórica
Un filme que no podía faltar en la conversación es La noche de los lápices, dirigido por Héctor Olivera en 1986. Ambientada durante la última dictadura cívico-militar, la película narra la trágica historia de un grupo de estudiantes de La Plata que fueron secuestrados y sometidos a torturas. “Es una película que te mete en el clima, seas conocedor o no de la historia,” aseguró Napal, haciendo hincapié en la capacidad de la película para conmover. Según el entrevistado, la película va más allá de la denuncia política y se centra en el sufrimiento personal de los protagonistas: “La idea era que se pueda entender bajo cualquier concepto de un gobierno autoritario, de tortura, y que ha habido cientos a lo largo de la humanidad.”
“Salvando los extremos,” agregó, La noche de los lápices es un filme “lindo de recordar en momentos en donde la protesta y el reclamo están tan criminalizados”, refiriéndose a la actualidad política, donde las manifestaciones son constantemente estigmatizadas.
Otro título que se mencionó en la charla fue Sudor frío (2011), dirigida por Adrián García Bogliano, una película de terror filmada íntegramente en La Plata. En este caso, la ciudad se convierte en el escenario de una trama de suspenso en la que un hombre investiga la desaparición de su novia, lo que lo lleva a una casa abandonada custodiada por asesinos con explosivos de la dictadura. Napal, aunque reconoce que la película presenta algunos “clichés y momentos repetitivos del cine de terror”, la recomienda para los fanáticos del suspenso: “Sudor frío es una linda película para los amantes del género”.
Los estrenos de la semana
Además de repasar estas producciones locales, Napal ofreció una mirada a los estrenos más esperados de la semana, comenzando por Gladiador 2, la esperada secuela de la icónica película de Ridley Scott. Protagonizada por Denzel Washington y Pedro Pascal, la película llega 24 años después de la entrega original. Napal admitió que es un desafío continuar la historia de una película tan emblemática: “Gladiador tiene el problema de cargar en la espalda con una mochila importante, ganó el Oscar a Mejor película en su momento” comentó, recordando también el premio a Mejor Actor para Russell Crowe. Sin embargo, reconoció que la secuela “trae consigo algunas polémicas, como la inclusión de varios actores afroamericanos,” lo que generó críticas por la representación histórica.
Otro estreno destacado es Golpe de suerte en París, la nueva película de Woody Allen. “Es una típica comedia romántica, con tintes dramáticos,” describió Napal, quien señaló que la trama se va volviendo más compleja conforme avanza, con “tintes delictivos y policiales.” Como siempre, Woody Allen añade su peculiar giro narrativo, por lo que la película también fue recomendada por Napal.
Por último, para los más pequeños, se estrenó Niko, la aventura de las narices frías, una película navideña que, a pesar de los “famosos clichés de Navidad,” promete ser una opción entretenida para las familias. Napal destacó la dificultad que enfrentan los padres para mantener la atención de los niños en un mundo saturado de estímulos digitales: “El clima del cine te invita a aislarte por completo y a la desconexión,” un detalle valioso en la actualidad.
