El plan “1.000 cuadras” que impulsa el intendente Julio Alak para que los vecinos financien obras de infraestructura comenzó a debatirse este lunes en comisión en el Concejo Deliberante y generó cruces y momentos de tensión entre funcionarios del Ejecutivo y la oposición.
El expediente, que ingresó al deliberativo antes del receso invernal, fue puesto en consideración en una comisión conjunta de Hacienda y Obras Públicas que presidió la concejala de Unión por la Patria, Micaela Maggio. Hasta allí llegaron el secretario de Hacienda, Marcelo Giampaoli; el secretario de Planeamiento, Planeamiento, Obras y Servicios Públicos, Sergio Resa, y el titular de la Agencia Platense de Recaudación, Carlos Mongan, con el objetivo de explicar los pormenores de la iniciativa.
El secretario de Planeamiento, Sergio Resa, participó de la reunión de comisión para explicar el plan 1.000 cuadras.
Como contó un portal local de noticias, Alak busca llevar obras de infraestructura como cordón cuneta, capa asfáltica, arbolado urbano y luminarias a barrios como Los Hornos, Villa Elisa, San Carlos, Tolosa, Gonnet, City Bell y Villa Elvira, con financiamiento de los propios frentistas. El pago se realizaría a través de la tasa de Servicios Urbanos Municipales (SUM).
Se trata de una reedición del plan que ya aplicó en gestiones anteriores al frente de la Comuna. Igual que en ese momento, el proyecto apela a la figura de “consorcios vecinales” previstas en la Ordenanza General N° 165 de la provincia para afrontar los gastos y declara las obras de “pago obligatorio” siempre y cuando el proyecto en cada barrio logre una adhesión del 70%.
En el arranque de la exposición, el bloque del PRO cuestionó varios puntos del proyecto. Los concejales Nicolás Morzone, Lucas Lascours y Lucía Barbier preguntaron si el Ejecutivo había pedido reunión con Nación para obtener financiamiento y evitar así que sean los vecinos los que paguen.
También sostuvieron de que el proyecto implica un “doble gravamen” para los platenses porque en la ordenanza fiscal impositiva de 2024 “ya está prevista una percepción para pavimentación”. Esto generó un contrapunto entre Lascours y un funcionario del equipo económico que adujo que las mejoras incrementarán el “valor” de las propiedades, mientras que el concejal y sus pares argumentaron que todas las obras que realiza el Municipio con la recaudación municipal le agregan valor y no son “facturadas” aparte a los vecinos. Lascours se terminó retirando de la reunión a los gritos.
El Plan 1.000 cuadras busca llevar obras de cordón cuneta, asfalto y luminarias a siete barrios de la periferia platense.
Otro de los puntos que la oposición objetó fue que el pago terminará siendo “compulsivo” para el 30% de los vecinos que no adhieran porque no pueden pagar, ya que los consorcios que logren el 70% de aceptación avanzarán con las obras. El oficialismo aceptó estudiar exenciones para esos casos y también se comprometió a estudiar ampliar el plazo de hasta 24 cuotas que prevé el proyecto.
Los funcionarios de Alak también se mostraron abiertos a modificar un punto clave: que las cuotas comiencen a pagarse una vez finalizada la obra y no antes. En este caso, el gasto sería afrontado por el Municipio y recuperado luego a través de la tasa SUM.
El debate continuará la próxima semana en comisión ya con las modificaciones sobre la mesa. Antes, este jueves habrá sesión ordinaria, la primera tras las vacaciones de invierno.