|
Escuchar la nota
Getting your Trinity Audio player ready...
|
Cerro Porteño enfrentará a Estudiantes en los octavos de final de la Copa Libertadores y su entrenador, Diego Martínez, sorprendió al revelar que solicitó siete incorporaciones. El DT busca reforzar todas las líneas del equipo y, mientras espera la habilitación para fichar, aguarda por las llegadas de Fernando Cardozo y Luis Amarilla, sus primeras caras nuevas.
El Ciclón, que enfrentará al Pincha en la Libertadores, trabaja en su pretemporada en el Complejo Internacional del Este (CIDE) de Minga Guazú. En ese contexto, el ex entrenador de Boca dio una entrevista en la que confirmó que solicitó refuerzos en siete posiciones clave para afrontar la segunda parte del año.
Antes de concretar las incorporaciones, el club paraguayo deberá pagar una deuda de 600 mil dólares a Bolívar por Francisco da Costa, para así levantar la inhibición que le impide contratar jugadores.
Una vez resuelta esa situación, se oficializarán las llegadas de Cardozo y Amarilla, quienes ya tienen acordados sus vínculos con Cerro por un año con opción de compra.
“El equipo necesita un lateral derecho, un central, un lateral izquierdo, un volante interno mixto, un enganche punta, un centrodelantero y una segunda punta”, detalló el técnico argentino. Con esas incorporaciones, Martínez busca rearmar el plantel tras varias salidas y otras posibles bajas que afectan todas las líneas del equipo.
Entre los jugadores que ya dejaron el club están Alan Benítez, transferido a Internacional de Porto Alegre y Diego León, que se sumó al Manchester United. Además, el técnico no tendrá en cuenta a Bruno Valdez, Daniel Rivas, Alan Soñora, Derlis Rodríguez y al propio Francisco da Costa.
A esto se suman posibles salidas como la de Wilder Viera, quien tiene una oferta concreta del New England Revolution por el 80% de su pase, y Federico Carrizo, tentado por Libertad con un contrato por tres temporadas y una mejora salarial.
Cerro Porteño no solo deberá rearmar su plantel con rapidez, sino también prepararse para un cruce exigente frente al León, con el objetivo de avanzar en el máximo torneo continental.
