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Finalmente, la Supercopa Internacional entre Vélez y Estudiantes se alojará en suelo argentino y en Avellaneda. Pese a que el reglamento establecía que la sede debía estar en el extranjero, la organización oficializó que el partido se disputará el domingo 6 de julio en el Estadio Libertadores de América Ricardo Enrique Bochini, casa de Independiente.
La decisión se tomó luego de que se cayera definitivamente la posibilidad de jugar en Paysandú, Uruguay. El Estadio Parque Artigas era la opción principal para albergar la final, pero la falta de acuerdo entre las autoridades salientes y entrantes de la intendencia local impidió que se avanzara con la organización del evento.
Nancy Núñez, la actual jefa comunal de Paysandú, cuyo mandato concluye el 11 de julio, no dio su aprobación durante las negociaciones, lo que dejó sin efecto la sede uruguaya. Si bien desde la organización querían mantener la final en Uruguay, rápidamente comenzaron a circular versiones que señalaban como posibles escenarios a los estadios de Lanús o Independiente. Finalmente, el elegido fue el Libertadores de América.
Desde la Comisión Directiva de Independiente confirmaron la noticia y ahora solo resta definir el horario exacto del encuentro. Esta será la tercera final consecutiva entre ambos equipos, luego del cruce en el Trofeo de Campeones, que ganó Estudiantes, y de otro enfrentamiento reciente que también definió un título.
El choque se jugará exactamente una semana antes del arranque del Torneo Clausura y promete ser un duelo vibrante entre dos equipos con intenciones de conquistar una nueva copa antes de que cierre el año.
