En medio de la creciente y acelerada inflación que enfrenta la Argentina, cada vez son más los gremios que presionan por fuertes aumentos de sueldo para seguir de cerca el incremento de los precios. En ese marco y todavía sin una nueva pauta salarial, la Unión Tranviario Automotor (UTA) volverá a reunirse con las cámaras empresarias del sector para dar continuidad a la paritaria mientras analiza avanzar con un nuevo paro de micros.
Las cámaras empresarias y el citado sindicato retomarán las negociaciones el próximo 29 de enero, tras tres audiencias en las que no lograron alcanzar un acuerdo. En la UTA ya se pronunciaron en estado de alerta y advirtieron que “se anunciarán inmediatamente las medidas de acción gremial en defensa del poder adquisitivo de los salarios”, en caso de no lograr cerrar el acuerdo paritario.
Las conversaciones parecen prácticamente paralizadas y no hay previsiones de que lleguen a buen puerto en un futuro cercano. El sindicato reclama un sueldo básico de $777.700 en enero y $972.125 en febrero más viáticos, pero las empresas manifestaron su incapacidad de solventar los costos que eso implica ante la falta de garantías por parte de la Nación y los gobiernos de la provincia de Buenos Aires y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) con respecto al envío de los fondos compensatorios que solicitan para cubrir esa actualización salarial.
La UTA amenaza con un nuevo paro de micros si no se llega a un nuevo acuerdo salarial.
En ese contexto el gremio podría convocar en los próximos días a un nuevo paro, en cuyo caso la Secretaría de Transporte podría hacer uso de la conciliación obligatorio para garantizar los servicios mientras se intenta destrabar el conflicto.
Los choferes de colectivo exigen dos aumentos consecutivos del 27% para el mes de enero y otro 33% para el mes de febrero, lo que llevaría los salarios iniciales del sector a $777.700 y $972.125, respectivamente.
Los choferes de micros reclaman un aumento del 27% para enero y otro 33% para febrero.
El reclamo, además, incluye el pago de una suma extra y no remunerativa de $126.921 y otros $73.800 al mes en concepto de viáticos.
El Gobierno argentino reveló semanas atrás su interés en aumentar más de un 250% el costo de las tarifas del transporte público y llevar el boleto mínimo de los micros a $270 en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y a $294,05 en La Plata y el resto de la región. No obstante, la Justicia hizo lugar al amparo presentado por el intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, y dictó una medida cautelar a través de la que ordenó suspender los incrementos.
El jefe comunal se mostró en contra del proceso iniciado por la Secretaría de Transporte de la Nación y con ello la audiencia pública en la que podría ser aprobada la nueva suba se pospuso varios días, por lo que finalmente tendrá lugar en los primeros días del mes próximo.
La Justicia suspendió el último aumento del transporte impulsado por el Gobierno nacional.
En medio de ese panorama y tras la salida del exministro de Infraestructura, Guillermo Ferraro, que tenía a su cargo el área, el Gobierno nacional recibió a empresarios del sector y dialogó con ellos sobre los subsidios del transporte. Las compañías sostienen que no han recibido pagos desde la primera semana de enero y manifestaron su preocupación al respecto, pero en el Ejecutivo se comprometieron a actualizar el valor de los subsidios que se encuentran congelados desde septiembre pasado.
