A más de dos semanas de la asunción de Julio Alak como intendente de La Plata, miles de vecinos se preguntan por qué los espacios públicos siguen con los pastos altos y por qué la invasión de mosquitos parece incontrolable. No se ve personal fumigando y hay incertidumbre sobre cómo se resolverá esta situación en el verano.
Si bien en los últimos días en algunos espacios verdes de la ciudad hubo gente con desmalezadoras cortando el césped, la realidad es que tanto en toda la rambla que bordea circunvalación, como en muchos otros espacios públicos adentro y afuera del casco urbano, el nivel del pasto es altísimo y eso trae mucha preocupación por la proliferación de mosquitos, con todo lo que eso implica en esta parte del año.
En la Municipalidad aún no se realizó ninguna comunicación oficial ni hay certezas sobre un plan específico para combatir esta invasión de insectos que por las noches entran hasta en las casas. Los vecinos de distintos barrios esperan ver personal fumigando o al menos cortando el pasto.
Hace varios días el Ministerio de Salud bonaerense realizó tareas de descacharrado, pero en la Municipalidad no hay precisiones al respecto.
Decenas de vecinos se comunicaron con un portal local de noticias para denunciar que hace mucho tiempo no ven tantos mosquitos en los patios de sus casas y quieren saber por qué no se los combate. Y los testimonios no hacen distinción de barrios, porque las quejas vienen desde Parque Sicardi hasta Villa Elisa, pasando por la zona del Hipódromo, La Loma, Tolosa, Ringuelet y Gonnet.
La situación es desesperante porque en verano está latente más que nunca la cuestión del dengue. El Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires informó días atrás que estaban realizando tareas de descacharrado en treinta municipios, entre los que estaba La Plata.
En medio de un nuevo brote de dengue, los vecinos reclaman por una fumigación urgente de los espacios públicos.
El Aedes aegypti -insecto transmisor del dengue- tiene hábitos domiciliarios y se reproduce en cualquier recipiente natural o artificial que contenga agua. Sus huevos pueden resistir las condiciones ambientales secas durante más de un año, siendo esta una de las estrategias más importantes que la especie emplea para sobrevivir y propagarse.
Por esta razón, las medidas de prevención más efectivas apuntan a la eliminación de objetos que puedan acumular agua, especialmente aquellos que quedan a la intemperie y acumulan agua de lluvia, y el control de aquellos contenedores de agua necesarios (tales como los bebederos de animales, botellas, etc.).
