El Tribunal Oral Federal 1 de La Plata juzgará a un exministro bonaerense y a un expolicía por el crimen de un hombre y el secuestro de cuatro de sus familiares, dos de ellos menores de edad, durante la última Dictadura Militar.
En el juicio que inició en horas del medio día de este jueves, se sentó al exministro Jaime Lamont Smart y el expolicía Juan Humberto Keller, quien durante la última dictadura militar se desempeñó en la comisaría de Berazategui. Ambos llegan al debate con el beneficio de prisión domiciliaria.
Por el crimen de Horacio Wenceslao Orué y el secuestro y tortura de sus cuatro familiares también llegó imputado el expolicía Héctor Amado, pero “los informes médico forenses determinaron que no está en condiciones desde el punto de vista psiquiátrico de afrontar el juicio”, confirmó una fuente judicial a Télam.
En el año 1976 la Junta Militar destituyó a María Estela Martínez de Perón y se impuso como gobierno de facto.
El hecho que se les imputa ocurrió a fines de abril de 1978, cuando efectivos de la seccional de Berazategui secuestraron a Raúl Aguirre y bajo tormentos lo obligaron a revelar dónde vivía Horacio Wenceslao Orué, hermano de Aguirre.
Aguirre les dijo que su hermano estaba en casa de una tía, en la calle Marcos Avellaneda 3239 de la localidad de Rafael Calzada y hacia allí se dirigió un grupo de tareas que irrumpió en la casa. Marcelina y su hijo de 9 años fueron obligados a tenderse en el suelo, en tanto un policía tomó al hijo de 14 años del cuello y lo obligó a llevarlo donde estaba Orué, quien vivía en una habitación del fondo. Cuando se acercaron a ese dormitorio vieron que Orué escapaba por los fondos, por lo que salieron en su persecución varios efectivos, registrándose un tiroteo en el que lo asesinaron. Orué luego fue enterrado en la clandestinidad en el cementerio de Rafael Calzada.
El grupo de policías revisó todas las dependencias de la casa y robó gran cantidad de objetos de valor y hasta ropa y una vajilla, todo lo cual fue cargado en un camión. En el tiempo que estuvieron los efectivos en la casa, Marcelina Juani y sus hijos permanecieron boca abajo en el suelo, donde fueron pisados en sus espaldas por los policías con botas.
Orue fue asesinado por las fuerzas represivas, el 22 de abril de 1978 en las inmediaciones de su domicilio, en Rafael Calzada, partido de Almirante Brown, provincia de Buenos Aires.
La mujer y sus dos hijos fueron trasladados a la comisaría de Berazategui, donde fueron alojados en un entrepiso de la seccional, donde compartieron cautiverio con otros detenidos, entre ellos Raúl Aguirre, oyendo los gritos de tortura de manera permanentemente.
Allí estuvieron cuatro días, tras lo cual fueron “legalizados”, mientras que Juani quedó alojada en los calabozos de la seccional y sus dos hijos permanecieron en el casino de oficiales a la espera de ser retirados por una vecina de confianza.
A Lamont Smart, en su carácter de ministro de Gobierno durante la dictadura militar, se le imputa el homicidio de Orué, la privación ilegal de la libertad seguida de tormentos de Marcelina, Marcelo Juani, Ariel Bernardo Juani y Aguirre y el robo de las pertenencias de la familia Juani. En tanto que Keller y Amado llegarán al juicio imputados de haber intervenido en forma directa en el homicidio de Orué, la privación ilegal de la libertad seguida de tormentos de Marcelina Juani, Marcelo Adolfo Juani, Ariel Bernardo Juani y Raúl Ernesto Aguirre y el robo de las pertenencias de la familia Juani.
