En medio de la euforia por el triunfo ante Rosario Central, el delantero de Gimnasia Cristian Tarragona no se olvidó de recordar a Francisco Bustos, el arquerito de 7 años que jugaba en las infantiles del Lobo y esta semana murió en un fatal accidente cuando su propio padre lo atropelló con un camión.
El goleador del partido conocía al pequeño y de hecho había posado en una foto con él. “Queremos dejar un mensaje para la familia de Francisco; para lo que necesiten estamos todos a disposición”, dijo Tarragona sobre el final de la nota televisiva que le hicieron tras el partido por ser la figura del partido: marcó los dos goles con los que Gimnasia obtuvo el triunfo por 2 a 1.
En la previa del partido -en tanto- se realizó un minuto de silencio en homenaje a Francisco, en tanto que también estuvieron presentes sus familiares en el campo de juego.
¿QUIÉN ERA FRANCISCO BUSTOS?
Además de ser un niño de 7 años y realizar las actividades propias de un menor de su edad, Francisco jugaba al fútbol en Gimnasia. Era arquero de la categoría 2016 y desde la institución enviaron sus condolencias a la familia y seres queridos.
Profundo dolor por el fallecimiento de Francisco Bustos, arquero de la categoría 2016. Un jugador muy querido por sus compañeros, entrenadores y el Club en general. Acompañamos a su familia y seres queridos en este duro momento.
La actividad deportiva del jueves 21 en El…
— Club de Gimnasia y Esgrima La Plata (@gimnasiaoficial) September 21, 2023
El niño había llegado a El Bosquecito el año pasado para dar sus primeros pasos en el fútbol infantil del Lobo, para algún día quizás pensar en defender el arco tripero en el Bosque. “La actividad deportiva del día jueves en El Bosquecito está suspendida”, comunicaron desde Gimnasia.
LA TARDE FATAL
Francisco Bustos fue atropellado por su propio papá en Tolosa, en el marco de una feroz pelea que terminó en tragedia. Fuentes policiales confirmaron a un portal local de noticias que los orígenes de la pelea que desató el triste suceso son muy antiguos y se relacionan a una violenta disputa familiar por un terreno ubicado en la zona donde todo sucedió.
La tragedia tuvo lugar en las últimas horas del miércoles, justo frente a un lote ubicado en 527 bis y 121. Según supo este medio, el abuelo de Francisco Bustos era el dueño de ese terreno que tiene unas dimensiones aproximadas de 15 metros de frente por 40 de fondo. El hombre vivía en una casa en el fondo del mismo y Fran, junto a sus padres, en otra ubicada en el frente hasta el año 2020 cuando se mudaron a Punta Lara.
El adulto mayor falleció y en 2022 su esposa se mudó también, quedando el lote, las dos viviendas y un par de galpones, totalmente desocupadas. Al enterarse, una de las hijas -tía de Francisco- quien según contó a Crónica TV estaba en situación de calle hasta ese momento, abrió el portón del lugar y se adueñó de la vivienda del fondo.
La mujer entró con su hijo y poco a poco se fueron instalando también otras personas que generaron un gran conflicto en el barrio. Los vecinos denunciaron que ese sitio se convirtió rápidamente en un búnker en el que vendían droga y que las personas que lo frecuentaban eran altamente conflictivas. “Hacían fuego en la vereda, todo eso era una mugre”, aseguró una vecina a este medio, quien agregó que esas personas comenzaron a robarle a todos los vecinos “si ponés un foquito en la vereda te lo roban, roban los tachos de basura y todo lo que pueden”.
El papá de Francisco trabaja en un corralón ubicado a una cuadra del terreno en cuestión y a pesar de estar viviendo en Punta Lara, frecuentemente iba a su antigua vivienda para ver el lugar. “Día por medio pasaba con el camión para ver como estaba la situación”, contaron los vecinos. Finalmente, el pasado miércoles, Francisco acompañó a su papá al sitio en cuestión a bordo de un camión marca Daihatsu, propiedad del corralón en el que trabaja, y tras bajarse por unos instantes los usurpadores terminaron echándolos con palos y piedrazos. El papá del nene se volvió a subir al camión para irse del sitio rápidamente y pisó al niño quien se había caído al intentar montarse en el vehículo.
Francisco sufrió serias heridas y aunque la ambulancia del Servicio de Atención Médica de Emergencias (SAME) no tardó en llegar, los paramédicos no pudieron hacer más que constatar la muerte del pequeño.
En el lugar trabajaron los agentes de la comisaría Sexta, el Grupo Técnico Operativo de dicha seccional, la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas, el Grupo de Apoyo Departamental y Policía Científica. El padre de Francisco, por su parte, quedó imputado en el marco de una investigación que fue caratulada como “homicidio culposo” y ya analiza la UFI N°14.
