Este 17 de agosto se cumplieron 30 años desde que el joven estudiante de periodismo Miguel Bru fue secuestrado, torturado, asesinado y desaparecido por policías de la Bonaerense, en la comisaría 9na. de la ciudad de La Plata.
A raíz de esto, en 1999 se condenó a perpetua al ex subcomisario Walter Abrigo, quien murió en la cárcel, y el sargento Justo López, por el homicidio y desaparición, mientras que por encubrimiento fueron sentenciados el ex comisario Domingo Ojeda y al exoficial Ramón Cerecetto, pero el cuerpo de Miguel Nunca fue hallado.
En este marco, este jueves 17 de agosto se iba a realizar, al igual que todos los años, una vigilia frente a la comisaría novena de La Plata a las 19 horas, pero a causa del fuerte temporal que se produjo ese día la movilización fue reprogramada para el martes 22 de agosto.
A raíz de esto, la madre de Miguel, Rosa Schoenfeld de Bru, recordó: “La iniciativa de la vigilia siempre se hace a la hora que lo ingresan a Miguel a la comisaría novena, hasta la hora que dicen los testigos que vieron que lo sacaron por la puerta de atrás a las 2 de la mañana, ese maldito 17 de agosto del 93”.
En esa misma línea, Rosa recordó, en diálogo con Sembrando Derechos (Radio La Plata FM 90.9), el mal manejo que tuvo la justicia en un principio.
“La justicia tiene distintas épocas, la primera experiencia con la justicia fue horrorosa, era el juez Amílcar Vara que llevaba la causa, tenía antecedentes, él era el responsable de encubrir la desaparición de Andrés Núñez, las torturas a Roberto Díaz, después lo investigó a la Procuración de la Corte y le encontraron irregularidades en 27 causas”, declaró Rosa Bru.
Cabe destacar que después de la desaparición de Miguel, cuyo juicio fue el primero por una desaparición de democracia, se realizaron más de 38 rastrillajes de búsqueda, los últimos se llevaron a cabo mayo de 2018 en la Comisaría 9.ª y en la zona cercana a playa Bagliardi en la localidad de Berisso.
Sobre esto, la madre de Miguel resaltó el rol de los amigos estudiantes de periodismo de su hijo y de la facultad.
“Tenemos que rescatar siempre que gracias a Dios Miguel le dirigió los pasos a querida Facultad de Periodismo y tiene los amigos que fueron los que realmente nos guiaron para entender que algo pasaba, que necesitábamos abogados”, declaró Rosa.
Y añadió: “Las marchas, la prensa, todo eso se lo debemos a estos chicos que eran estudiantes y compañeros de Miguel que pusieron el cuerpo y todas las herramientas que tenían hace 30 años”.
Por otro lado, Rosa habló sobre uno de los condenados por el asesinato y la desaparición de Miguel, y aseguró que “no lo quiere preso”.
“Ya no sabemos que más ofrecerle al Negro López, hoy sabemos que se llama Justo López, que es el que sabe realmente dónde está Miguel, porque los que estaban con él esa noche torturándolo que nunca fueron nombrados porque no fueron reconocidos por los detenidos, los principales testigos de las torturas a Miguel”, declaró.
“Hay una recompensa ofrecida por el gobernador Kicillof de hasta 5 millones de pesos, le ofrecimos la libertad a López, que colabore con la justicia y que sea beneficiado con una excarcelación, o sea, él está reclamando arresto domiciliario porque se está poniendo viejo”, añadió.
Sobre esto, la madre de Miguel sostuvo que si el expolicía colaborara con la justicia “todos esos beneficios que no le corresponden, los tendría”
Finalmente, Rosa recordó que cuando faltaba poco menos de un mes para que se cumplan estos 30 años que duelen tanto, “alguien se acercó y dijo creer saber dónde está Miguel Bru”.
“Me llamó el fiscal y me dijo que hay un testimonio. Yo siempre voy a decir lo mismo, todos aquellos que se acerquen con un dato, que crean saber y lo dicen la justicia para mí, significa qué la lucha no fue en vano, que se entendió lo que nosotros estamos necesitando, no queremos más presos, queremos a Miguel”, concluyó.