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El abogado de Alan Quiroga, procesado por intento de homicidio, solicitó que el joven siga en prisión preventiva, pero bajo la figura de arresto domiciliario, solicitud que no fue rechazada por la fiscal del caso. Tal como informó 0221.com.ar la justicia platense dictó la prisión preventiva para el acusado del feroz episodio ocurrido en la madrugada del 11 de junio pasado. Se trata del sospechoso de atropellar con su auto de manera artera a otro joven identificado como Alejandro Medina con el que había mantenido una discusión en el boliche La Queimada. Tras más de diez días de intensa búsqueda, el entonces prófugo fue atrapado en una vivienda de la localidad platense de José Hernández, donde se escondía de las autoridades.
Luego de dictar la medida el juez de Garantías Guillermo Atencio espera el resultado de una serie de informes para resolver el planteo de la defensa.
EL BRUTAL EPISODIO
El caso conmocionó a la ciudad, no solo por la brutalidad con la que actuó el acusado sino también por las impactantes imágenes que se conocieron horas después del hecho. El registro de las cámaras de seguridad instaladas en la cuadra donde todo sucedió dan cuenta del atropello inicial y del hecho de que el atacante regresó a la escena instantes después de arrollar a toda velocidad a su víctima e intentó hacerlo de nuevo, pero los amigos del joven herido se interpusieron y también resultaron heridos.
La salvaje embestida del conductor del Chevrolet Astra ocurrió el 11 de junio pasado, a pocos metros de la puerta de reconocido boliche La Queimada, ubicado en 26 y 60. Ambos habían mantenido un fuerte altercado en la puerta del local bailable, que también quedó grabado en las cámaras de seguridad del lugar.
Tras el hecho, el joven herido tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital San Martín, donde fue operado de urgencia y quedó alojado en un delicado estado de salud por la gravedad de las heridas. Medina sufrió quebradura en su maxilar y mandíbula entre otras lesiones provocadas por el impacto del Chevrolet Astra. Estuvo internado en terapia intensiva y fue derivado a una sala común, pero su estado sigue siendo delicado.
TESTIMONIOS
En el expediente que lleva adelante la fiscal Cecilia Corfield declararon varias personas que fueron testigos del hecho. Uno de ellos fue Ramiro Fernández: “En un momento en la puerta del boliche se armó una pelea, a mí me dieron un cachetazo en el cuello del lado izquierdo, me pegaron de frente. Recuerdo que el de negro salió corriendo y Alejandro (…) le dijo a este pibe algo así como ‘que le pegas a mi primo ahora vas a tener que pelear’”.
En otro pasaje de su declaración graficó como fue la feroz embestida del automovilista: “Lo siguiente que me acuerdo es ir caminando por una vereda y Alejandro iba por la calle unos metros más adelante, en ese momento escucho un golpe fuerte y veo que a Alejandro lo chocó un auto negro”. “Es en ese momento cuando empecé a gritarle ‘qué haces’… me acuerdo que Alejandro estaba tirado en la calle, con los ojos cerrados y sangre saliendo de la boca”.
Jonatan Sagini, otra de las víctimas de ese instante, rememoró en sede judicial que mientras asistían a su primo Medina “este chico del auto volvió, paró unos metros antes de donde estábamos nosotros empezó a tocar bocina de nuevo, sacó la cabeza por la ventanilla como diciendo acá estoy de nuevo, el auto tenía el parabrisas roto, supongo que fue por el golpe que le dio antes a mi primo. Ahí se levanta y le dice pará, pará y este pibe nos tiró el auto encima y nos chocó, a mí me sacó de lugar unos huesos de la mano, nos chocó a todos”.
PALABRA DE ACUSADO
En su primera cita ante la fiscal, el detenido se llamó a silencio, pero días después pidió declarar y dio su versión del caso. Señaló que esa madrugada su hermano estaba discutiendo, intentó separarlo, sacarlo del lugar y le grita que corra hacia el auto. “Me subo y lo arranco, trato de hacer marcha atrás, de los nervios hago unos metros y al no entrar la marcha atrás, pongo primera, subo a la vereda y salgo en dirección a calle 26 hacia 59”.
“A treinta metros escucho un explosivo o piedrazo en el auto, trato de pisar el freno lo más rápido posible y siento un impacto, al llegar a la esquina doy la vuelta manzana y regresó hacia donde había sentido el impacto, me acerco hasta el lugar y había una persona arrollada en el suelo. Saco la cabeza hacia afuera del auto, tenía el parabrisas astillado y no veía hacia adelante”, aseveró Quiroga en su teoría defensista del caso.
EL EXPEDIENTE
La causa todavía se encuentra en plena etapa de instrucción, resta producir prueba. La familia de la víctima fue aceptada en el expediente como particular damnificada y cuenta con el asesoramiento del abogado Gastón Nicocia.
Una vez que esté producida toda la prueba de cargo y descargo la fiscal estará en condiciones de requerir que el caso sea llevado a juicio oral y público.
