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23 Jul, 2023
Por Andrea Mazzei
Abel Pintos es uno de los cantautores argentinos más reconocidos en el país y en el exterior. Con 30 Premios Gardel en su haber, incluidos tres de Oro, su capital radica especialmente con la emoción con la que son recibidas sus canciones por parte del público. Por ello, el músico de 39 años está cosechando con creces lo sembrado en su recorrido profesional, que comenzó aun siendo muy joven y que parece no tener límites.
Hace solo unos días, más precisamente con motivo de la celebración del Día de la Independencia el 9 de julio, Abel se presentó en el Teatro Colón para lanzar su álbum Alta en el Cielo, frente a más de dos mil niños. El trabajo musical incluyó ocho canciones patrias emblemáticas, como el “Himno Nacional Argentino”, el “Himno al General San Martín” y la “Marcha de San Lorenzo”, entre otras. “¡Muchas gracias a todos! Es una emoción muy grande para mí y para todos nosotros estar en este momento arriba del escenario y por compartir con ustedes estas canciones, nuestra historia y nuestro sentir nacional”, dijo sobre el imponente escenario acompañado por la Orquesta Académica del Teatro Colón y la dirección de Ezequiel Silberstein.
El músico relató algunos detalles sobre la realización del disco, tan especial en su carrera: “Llevó algunos meses y más de 500 personas trabajaron en todo esto, pero en realidad es un sueño que trae 25 años conmigo, en mi corazón”, admitió y se remontó a su niñez para reflejarse en su especial platea de locos bajitos. “Cuando tenía la edad de muchos de ustedes, escuché por primera vez en un disco estas ocho canciones y sentí algo que quiero compartir en este momento. Sentí que al escuchar estas canciones patrias, estos himnos, estas marchas no son piezas de un museo”, agregó ante el auditorio infantil.
“Mi trabajo es la bitácora de lo que me pasa como persona, escrita con el idioma que elegí: la música”, había confesado tiempo atrás Abel en una entrevista con Teleshow. Y con ese lema siempre en alto, se emocionó frente al público que lo ovacionó de pie y entonó las estrofas del Himno Nacional Argentino con la misma alegría que él. De este modo, el músico permitió que las canciones se subieran a una plataforma desde donde se pueden descargar de manera gratuita, www.himnosargentinos.ar. Y por otra parte, en el marco de un convenio con Sony y con Sadaic, Abel donó las regalías a perpetuidad a los 3 hospitales públicos que dependen de la Universidad de Buenos Aires, que son el Hospital de Clínicas, el Hospital Roffo y el Instituto Lanari.
Para el músico, “los himnos son de todos los argentinos y quiero volver a ponerlos en valor para que todos los chicos y las familias vuelvan a escucharlos y se conviertan en nuevos hits”.
Para esto, el cantautor hizo un trabajo muy profundo, con organizaciones educativas y culturales, basado en la historia argentina de 1813, buscando el origen de cada tema, involucrando a muchos músicos e incluso a la Orquesta Juvenil del Teatro Colón. Se hizo una acción conjunta con el Ministerio de Educación de la Nación, el Consejo Federal de Educación, la ciudad de Buenos Aires, el Teatro Colón, la AFA, Sadaic, Sony Internacional, el Fondo Nacional de las Artes para que esta acción sea completamente gratuita, libre y universal, y en ese proceso se sintió muy emocionado de poder ser una herramienta para concretar ese sueño.
Después de este trabajo intenso desde lo físico y lo emocional, el cantautor disfruta de unas merecidas vacaciones en Miami, junto a su familia. Con su mujer Mora Calabrese, la hija de ella y “del corazón” para Abel, Guillermina, y Agustín, el pequeño hijo de ambos, pasearon y descansaron en la playa de Naples, durante dos días, y luego regresaron a la ciudad de La Florida.
Durante su estadía en Miami, se pudo apreciar su emoción cuando su familia le hizo un regalo mientras estaban comiendo en un reconocido shopping de la ciudad. En un video se ve cómo el músico estalló en llanto cuando vio que la caja que le habían obsequiado contenía un reloj y una pequeña guitarra, una réplica simbólica de la que lo esperaría en su casa. Un detalle de su simpleza y de su sensibilidad, que son las mismas que transmite a su público y que sus seguidores agradecen cada vez que escuchan su voz.
Pero no todo fue descanso en sus días en Miami, ya que el músico mantuvo reuniones con productores importantes de Estados Unidos, como parte de un proceso de expandirse al mercado internacional como artista. Según sus allegados, se encuentra en tratativas para desarrollar un proyecto como cantante ligado a figuras del mercado latino, como Marc Anthony y Marco Antonio Solís.
A partir del lanzamiento del disco de las canciones patrias, Abel se plantea cumplir un sueño que le falta por realizar: dar un concierto en el estadio de Racing, el club de sus amores para cerrar un año magistral a nivel profesional y personal. Cabe recordar que el músico ya había realizado varias acciones solidarias, cuando convocó luego de un concierto suyo a 1371 chicos ciegos y también hizo un cancionero en braille. En estos momentos, tiene planeado hacer acciones caritativas con el Sanatorio Fleni y con la Casa Garrahan.
En resumen, según su círculo más íntimo, Abel está en el mejor momento de su carrera, con un desarrollo profesional muy importante, en el que está proyectando difundir su música a través del idioma español al exterior. Por otra parte, se acaban de agotar las entradas para el concierto que dará el próximo 18 de noviembre en el estadio de Vélez Sarsfield de la Ciudad de Buenos Aires. Sus temas nutren el cancionero popular argentino y se transmiten entre generaciones. Y mientras tanto, disfruta de la familia que ensambló y construyó, el pilar sobre el que concibió su carrera, su arte y su vida.