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Una delegación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) visitó el Centro de la Madera de la UNLP, dependiente de la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales. El organismo internacional fue el encargado de financiar la construcción del espacio a través de un programa que incluyó la suma de alrededor de 4 millones de dólares entre equipamiento e infraestructura.
El Centro de la Madera es un complejo forestoindustrial universitario de características únicas en la región. Se encuentra ubicado en la Estación Experimental Julio Hirschhorn que la UNLP posee en Los Hornos, en avenida 66 y 167, y cuenta con una superficie cubierta de más de 2 mil metros cuadrados que incluyen aserradero, sala de acopio, horno secadero, sala de afilado y cepillado, y taller de carpintería.
Una de sus características salientes es que, a las tareas propias de la producción maderera, se suman además actividades de investigación y capacitación de técnicos y profesionales. El Centro de la Madera cuenta con tres grandes líneas de producción en marcha: muebles de diversos tipos; composteras, huerteros y otros elementos en convenio con el Ministerio de Ambiente bonaerense; y casas de estilo canadiense.
La delegación del BID estuvo integrada por Florencia Reca, coordinadora técnica del Programa de Sustentabilidad y Competitividad Forestal; Paolo Di Salvo, jefe de proyecto, y Juan Butcher, analista de operaciones, visitó el Centro de Capacitación, Transferencia de Tecnología, Producción y Servicios en Madera, dependiente de la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la UNLP. Fueron recibidos por Gabriel Keil, vicedecano de la Facultad y responsable del espacio.
En relación a esta destacada visita, el vicepresidente académico de la UNLP y uno de los principales impulsores del proyecto, Fernando Tauber, expresó: “El Centro de la Madera es un fiel ejemplo de la política de desarrollo productivo y social que llevamos adelante desde la UNLP, poniendo todos nuestros recursos y conocimientos al servicio de las demandas sociales más urgentes”.
A su vez, explicó que “uno de los grandes objetivos de esta iniciativa es poner a disposición de la comunidad viviendas accesibles, seguras y eficientes ante problemáticas o catástrofes que requieran soluciones habitacionales de emergencia, como pueden ser inundaciones, incendios, necesidad de ubicación, entre otras”.
Al respecto, el vicedecano Keil afirmó “logramos construir un vínculo muy sólido y exitoso con la institución que, en esta oportunidad, nos visitó para monitorear los resultados del programa en cuanto a funcionamiento, materia prima, formas de trabajo, mano de obra, destinatarios, proyecciones”.